Перевод: со всех языков на все языки

со всех языков на все языки

necesitado

  • 101 needy

    adj.
    1 necesitado, necesitoso, menesteroso.
    2 apurado.
    s.
    the needy -> los necesitados, los pobres, los indigentes.

    Nuevo Diccionario Inglés-Español > needy

  • 102 underprivileged

    adj.
    desfavorecido(a).
    s. & adj.
    necesitado, desamparado, desvalido.

    Nuevo Diccionario Inglés-Español > underprivileged

  • 103 very poor

    adj.
    muy pobre, misérrimo, archipobre, muy necesitado.

    Nuevo Diccionario Inglés-Español > very poor

  • 104 without money

    adj.
    sin dinero, necesitado de dinero, falto de dinero, sin un centavo en el bolsillo.

    Nuevo Diccionario Inglés-Español > without money

  • 105 besoin

       estar necesitado
       hacer alguien sus necesidades (sus cosas / cositas).
       Expressions devenues plus rares: hacer una diligencia / hacer de cuerpo.
       que buena falta nos hace

    Dictionnaire Français-Espagnol des expressions et locutions > besoin

  • 106 atavarius

    Atavarius son atalajes, herramientas, etc. También se suele denominar así a la bragueta. Ahora que viene al hilo esta palabra les voy a relatar un caso que presencié una noche cuando era muy pequeño en cierta velada de mi aldea. Era por los hambrientos, miserables, enlutados y tristes años cuarenta, estábamos aquella noche caleciendu tres el char de la teixá del bonu de Ñ icomedes (calentándonos tras el lar de la casa del bueno de Nicomedes) mi madre y yo, el abuelo Nicomedes, su hija Manuela que también era viuda como mi madre, y tres hijos que tenía que eran aproximadamente de mi edad, y también se encontraba con nosotros un pobre. —Quiero señalar, que en la casa del formidable hombre que era el abuelo Nicomedes, siempre encontraban refugio y eran tratados como si de un familiar se tratase, todos los pobres que llegaban pedigüediñandu (mendigando) a mi aldea. Recuerdo que había un fuego saludable y confortable, que industriaba la reseca leña de encina, roble, haya o castaño bravo, y colgado de las pregancias (cadenas), hervía con fuerza y sordamente un grande pote, donde cocían los pulgus de les pataques (mondos de las patatas) y demás ingredientes que eran la comida de los cerdos. No había en la aldea energía eléctrica, ni tampoco nos alumbrábamos en aquel lleldar (acaecer) con ninguna otra luz que no fuese la que nos brindaba el alegroso pa fuéu (padre fuego). Todos nos encontrábamos escuchando medio embrujados los hermosos cuentos, historias y leyendas que magistralmente nos narraba el abuelo, y hasta el pobre se sentía entusiasmado y feliz, atendiendo sin perder palabra aquella narración que en la más pura lengua asturiana nos contaba el abuelo, por esto, nadie se dio cuenta que una gran pocétcha (chispa) saltara con fuerza de un caricote del char (tizón del fuego), haciendo acomodo entre los atavarios (bragueta) del pobre, que al encontrarse muy grebas y'enxugáus (demasiado secos) empezaron a arder. El caso fue, que nadie se percató que olía a ropa quemada, hasta que no vimos al desventurado pobre lanzar un grito aterrador sembrado por su miedo, a la par que se levantaba del escaño con la rapidez de un relámpago, con todos sus atavarius (bragueta) envueltos en ardientes llamas, y con palabras que retrataban el inenarrable pavor que le atenazaba, decía al parejo que con su gorra y manos desesperadamente intentaba apagar el fuego que encima de él se desbordaba: —¡Chaime agua, chaime agua, qu’amagüestu enteiru! (Echarme agua, echarme agua, que me quemo entero). —Recuerdo que todos nosotros en un principio sorprendidos por tan insólito acontecer, nos quedamos mudos y asombrados durante un tiempo que medido seguro no alcanzaría ni un segundo, pero transcurrido éste, una risa enloquecedora por completo nos encadenó, lo mismo que si el demonio se apoderase de nuestros espíritus, reíamos alegres y despreocupados mientras que el desdichado y desesperado pobre, envuelto por las llamas que cada vez más se agrandaban, nos miraba sacudido por un miedo que le trasladaba a otro mundo, porque dentro de su situación mortal y desesperada, quizás estuviese viendo en nuestros alegres rostros, la propia faz de los malditos demonios, que se reían y mofaban del perentorio mal del hermano prójimo. Reaccionó al final Manuela, siempre dominada por la escandalosa risa que a todos nos arretrigaba (ataba), y descolgando un caldero grande de agua, que estaba de fría como el mismo hielo, se lo lanzó con fuerza, a los encendidos atavarios del ya casi enloquecido mendigo, que se desplomó de espaldas en el recio escaño, perdiendo por completo el conocimiento. Quedose el pobre ya apagado el fuego, estingarráu (tirado, estirado) en grotesca postura encima del escaño, no moviendo pie ni mano, lo mismo que si ya fuera muerto. Huyó la risa con rapidez de las personas mayores que rodeábamos aquel ancestral lar, aunque los pequeños con igual gracia aun nos seguíamos riendo, pero pronto el susto se fue apoderando de todos y con fino manto nos envolvía en el miedo, y a éste llegamos cuando Manuela sacudiendo al pobre con fuerza tal, que entre sus manos el desdichado mendigo tal parecía un inanimado muñeco, y a la par que esto le hacía, ya sin la menor risa y sí cargada de temor le decía: ¡Espierte Antón, deixe ya ‘l xopunciu, que noi queimú namái qu’el calzón cimeiru! (Despiértese Antón, deje ya el susto, que no le quemó nada más que el calzón de encima). —Cuando Manuela ya se dio cuenta de que el desdichado no volvía en sí, ya dominada por una verdadero miedo dijo: ¡Bona la fixemus, pos isti probe morriú d'afechu! (Buena la hemos hecho, pues el pobre se ha muerto del todo). El revuelo que se formó en aquel lar, que hasta hacía breves momentos todo era felicidad, armoniosa y dichosa risa, así como sana alegría, fue grande, pues todos los pequeños dominados por el miedo, dimos rienda suelta a un nutrido llanto, que no era tanto por el pobre que se había muerto, sino por el pánico que veíamos retratado en el rostro preocupante de nuestros mayores, que no sabían lo que hacer ni pensar, con el desdichado pobre al que creíamos muerto. Y cuando el abuelo Nicomedes ya se estaba calzando las madreñas para ir en busca del alcalde pedáneo de la aldea, para que tomase medidas con aquel triste suceso, retornó Antón del mundo de los muertos donde le habíamos situado, y dijo palpándose sus atavarius: ¡Menus mal que nun queiméi namái qu’el calzún cimeiru, pos s'apuerta tamién faer magüestu nel fondeiru, ya nun podría enxamás añuedar el cibiétchu, ya xería bona pena, perque tavía tenu llixa p'amañucar guapus nenus! (Menos mal que no me quemó nada más que el pantalón de arriba, porque si hubiese hecho también hoguera en el de abajo, ya no podría jamás hacer el amor y sería una pena, porque yo todavía tengo fuerza para hacer preciosos niños). En el pequeño espacio de tiempo que encierra un pestañeo, mudose el pánico de los sentimientos de nuestros mayores, y en su lugar luciose alegre el feliz contento, y el llanto que los pequeños traíamos en manto de lágrimas, quedose ahogado y seco, y en su lugar, volvió alumbrase la inocente risa, al ver a nuestras madres contentas de nuevo. La buena de Manuela, que era de buena y simpática lo mismo que el querido abuelo, le dijo al pobre a la par que prendía el candil de esquisto, porque el agua vertida sobre el lar, en parte ya había apagado el ardiente y confortable fuego: ¡Bon xustu nus fexu coyer, diañu de probe, pos ya taba 'l miou pá mangandu les madreñes, pa dir catar el pedañú, pa que nus dixera lu que teñíamus que faer col sou escallixeru curpu! (Buen susto nos ha hecho coger, demonio de pobre, pues ya estaba mi padre calzando las madreñas para ir en busca del pedáneo, para que nos dijese lo que teníamos que hacer con su escalijero cuerpo). —Pos tóus teñíamus papáu, que la sou alma ya taba nel xareteiru 'l diañu, fayendu de caricote paque nun murriera 'l fuéu del enfernu. (Pues todos teníamos creído que su alma ya se encontraba en la cuesta pradera del demonio, haciendo de tizón, para que no se muriese el fuego del infierno). ¡Bonu 'l casu ye, que ya tóus denuéu golguemus tare fellices ya cuntentus, axina qu'agora mesmu, achevántexe del escanu ya mítaxe nel cuatu mióu pá, ya puenga unus fatucus enxuchus que vóu dexale, metandu callentru 'n escudiétchau de lleiche con caña, que xebrará del sou rancuayu curpu, 'l xustu qu' entavía l'encibiétcha, ya 'l fríu que l'enxenebra, per mor de la mochaura que le fexe, p'apagai 'l fuéu q'entremedaba lus sous atavarius, que paeme a min, que deben tar más escosaones, que la mióu vaca mariétcha, qu’achucá durme na corte, ya la condená vou tenet que vendeya, perque nin pari nin preña, nin da más ganancies que la lleichi del cuernu! (Bueno el caso es, que ya todos estamos de nuevo felices y contentos, así que ahora mismo, levántese del escaño y métase dentro del cuarto de mi padre, y póngase estas ropas secas que le doy, mientras que le caliento una buena taza de leche con coñac, que le sacará de su cuerpo el susto que todavía le encadena, y también el frío que le está helando, por causa de la mojadura que le he hecho, cuando le apagué el fuego que se entretejía en sus atavarios, que me parece a mí, que ya deben de encontrarse más secos, que mi vaca Amarilla, que está acostada en la cuadra, y la condenada voy a tener que venderla, porque ni pare ni preña, ni me da más ganancias que el trabajo que le arranco por los cuernos). Como bien se puede comprender por lo que se desprende de este relato, en aquellos alejados y miserables tiempos de mi niñez, imperaba en mis queridas aldeas, la sublime y natural sencillez, dentro de un amor desmedido hacia el necesitado, con el que se compartía en una limpia y sana hermandad que hoy ya no existe, el pan, el vestido y la lumbre del lar, sin jamás sentir ascos ni repugnancias hacia los mendigos, que muchas veces llegaban aviñonainus de pioyus (cargados de piojos), y a pesar de esto y de otras cosas, al pobre se le respetaba y se le quería. Sin embargo hoy día, al tenor de que los pueblos se van llenando de más cultura, va desapareciendo de las gentes lo más humano y delicado que en sus espíritus se alberga, y en su lugar, florece con fuerza una endiosada hipocresía, que se está comiendo poco a poco y sin el menor descanso, la hermosa sencillez y naturalidad, que tenían las gentes de antaño, desconocedoras de estas corrientes de culturas modernas, pero dueñas y soberanas de la maravillosa virtud de comportarse en todo momento como verdaderos seres humanos. Hoy sin embargo, quedamos todos muy bien con la palabra, pero tenemos el nido de los sentimientos, en poder de la codicia y de la envidia, dentro de una podredumbre que invita al asco.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > atavarius

  • 107 cazurru

    Cazurru, poco espléndido, necesitado, ahorrativo, empequeñecido, etc., etc.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > cazurru

  • 108 probe

    Probe, pobre, mendigo, necesitado, etc.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > probe

  • 109 riera

    Riera, así se llama a la ribera. Nuestra Tierrina se divide en tres zonas muy diferenciadas, xentes vaqueiras, xentes de la riera y a xentes de la mariñana, quiere esto decir, gentes de la montaña, gentes de la ribera y gentes de la marina. En la ribera y la marina es donde están enclavados los grandes caxeríus (caserías), en las aldeas de las montañas no hay lugar para estas poxexones tan axeitáes (posesiones amplias, llanas, bien situadas, etc.), en las aldinas hay teixáes de llabranza (casas de labranza) más o menos ricas, pero en definitiva más costosas en sus trabajos y menos productivas. A mí siempre me gusto ir a las ferias y mercados, jamás compré ni vendí ningún ganado porque nunca ninguno tuve, pero yo me crié entre ellos, por esta razón todavía en el día de hoy siempre que puedo voy a las ferias del ganado, y se distinguir casi sin equivocarme quienes son los astures de la montaña o vaqueirus, los de la riera o la marina, aunque entre estos dos últimos algunas veces me confundo. Se distinguir al tratante honrado del marrullero, soy un alumno muy aventajado de todas las cosas sencillas y ancestrales de mi Tierrina, porque sin ser mía ninguna, he tenido que estudiarlas todas para que no se me enojase ninguna. Lo que jamás he estudiado fue en ningún colegio de pago, por esta razón no he podido aprender el arte de mentir, de halagar, de hacer el pelotillero, que de seguro me hubiese reportado largos y alegrosos beneficios, porque en este mundo el que dice la verdad sencilla, simple, natural y noble, pronto se encargan de cortarle el rexuétchu, los que tuvieron la xuerti de estudiar, titularse, etc., etc., etc., en un colegio de pago. (Tengan presente cuantos me escuchen que en este sentido yo hablo siempre dirigiéndome a la treldada de los dirigentes del Conceyu Bable y Amigos del Bable, y no porque personalmente me hubieran hecho a mí nada, sino que por la causa de su fucheróuxa manera de tratar mistificando, enredando, y liando a las gentes de Asturias, con su forma de inventar malamente vocablos, y cambiar las perfectas definiciones de las palabras por otras que ellos se han sacado no se de que estercolero de los muchos que según parece deben de tener en sus cerebros. Porque hay que tener estos lares desnaturalizados d'afechu, para meterse a titulados en una carrera, en la que a poco que piensen ellos sólo pueden algamír el puesto de las bestias, ya que como jinete sólo la podré ganar yo, si la ''Cadarma" me dexa vivir hasta que sea viétchu, y les vidayes non s'escosen de entendimiento. Aquí en este trabajar diario en el rescatar las Costumbres y la Llingua de Asturias, es preciso no tener títulos, ni ser adelantado profesor de pacotilla de filosofía y latín, aquí lo que se necesita es saber la LLingua D'Asturies, y decírsela a las gentes con la sencillez y naturalidad con que ha vivido siempre. No vale ir a la guerra por deporte, ni para aparentar en valentía, o para hacer bulto, o enfriar las balas que el enemigo dispara, a la guerra se va para defender la razón y la justicia hasta vencer o morir. Que es lo que yo estoy haciendo, porque parece ser que yo tan solo nací, para defender la LLingua de mi Tierrina de ese cabanáu de rapiegus, que jamás se preocuparon de hacer nada hasta que yo los desperté, y ahora quieren hacerlo ellos todo, pero copiando de mi trabajo y haciéndolo al revés. —Pero en todo este despertar de estas gentes ávidas de resonancia en alguna cosa, que sin comprometerse en la ridiculez, les valiese para dárselas de asturianistas, no sabiendo de Asturias nada más, que una buena y sola cosa, como fue y es, el buen duernu que desde que han nacido, tuvieron delante el su focicu en cuantas cosas han necesitado para poder ser algo más de personas de peso de lo que lo han sido en toda su miserable vida. Digo que algo de positivo han hecho, pues por lo menos me han ayudado grandemente en conseguir hacer propaganda en los diferentes medios de comunicación de Asturias, lugares que para mí siempre estuvieron cerrados, y aquí si que aunque muchas gentes se han reído de sus infantiles ridiculeces, por lo menos han hecho y concienciado la alerta, también me prestaron grande ayuda pintando las paredes y murias de las carreteras de mi querida Tierrina, aunque también no sabían muy bien como lo tenían que hacer, así que también yo les enseñé hacer tal cosa, ya que los subí hasta la misma cumbre del Puertu Payares, y siempre han respetado mis pintadas lo mismo que yo he respetado las de ellos. Yo siempre pensé, que si en vez de hacer todo mi costoso e increíble trabajo en solitario y en la más humilde pobreza, hubiese contado con la ayuda de ellos, no me refiero a pesetas porque no creo que tuviesen muchas, sino al número de personas jóvenes que tenían, no quiero pensar lo que hubiese pasado, pues seria muy capaz de fomentar si preciso fuera, hasta una sangrienta revolución en la defensa de las Tradiciones y Ancestral Cultura de Asturias, que en definitiva es siempre la sabia nueva que alimenta la Justicia y Libertad de los Pueblos, ya que en las Raíces está la poderosa fuerza, que alumbra los frutos de la inteligencia Humana, un Pueblo sin Raíces, es como una patria sin bandera o una religión sin dios. Yo pienso, que las Raíces de un Pueblo, son el saber nacer para con mucha prisa aprender y el saber morir de las gentes enseñando y aprendiendo.

    Primer Diccionario Enciclopédicu de la Llingua Asturiana > riera

  • 110 aprezisato

    apremiado, necesitado, precisado

    Dizionario Aragonés - Castellán > aprezisato

  • 111 carente

     carente | carentes
     adj. 2 gén. carente, que carece, que no tiene, que precisa, que necesita, necesitado, falto.

    Diccionario Portugués-Español > carente

  • 112 precisar

     v. tr. indicar con exactitud, particularizar, distinguir, especializar, tener precisión o necesidad de, carecer, necesitar, citar o mencionar especialmente.
     v. intr. ser pobre o necesitado, tener necesidad, ser preciso o necesario.

    Diccionario Portugués-Español > precisar

  • 113 adano

    Desgraciado, necesitado, vergüenza, adano iya moforibale aremu, awa yé: madre nosotros los desgraciados te saludamos, te afamamos, para que nos protejas. (dirigiendose a una divinidad)

    Diccionario Yoruba-Español > adano

  • 114 mi oshí

    Esoy necesitado, pobre.

    Diccionario Yoruba-Español > mi oshí

  • 115 Babalawó:

    Sacerdote consagrado por Orunla. A continuación reportamos un arreglo de la versión que nos dio el olúo Achaddé Oré, de los hijos de Orunla y sus asuntos. Cuando San Francisco Divino reclama la cabeza de un hijo suyo, ninguna obra religiosa lo puede retener ni impedir. Si de chiquito a Ud. le asentaron en su cabeza al mismo Obatalá, por que él así lo pidió, cuando Orunla reclama esa cabeza para que los asienten a él, Ud. tiene que ir a un Ilé de babalawó, donde lo preparan para entrar en la Orden de los Babalawós. Desde entonces Ud. no tiene que ver con las prohibiciones y obligaciones del orisha anterior. Cuando le asientan Orúnla, lo hacen sobre el santo anterior que Ud. lleva en la cabeza; lo que sucede es que Orúñla desplaza o borra al otro en su erí. Fíjese bien que Orúnla es muchacho de dieciséis años y sin embargo Obatalá lo obedece. Obatalá le dio poder a ese Orísha. Una vez había una guerra en un lugar a causa de las malas órdenes de un oba. La gente se mataban y le pasaron aviso a Obatalá de la destrucción de sus hijos. El viejo salió a buscar a un babalawó para registrarse en el ékuelé. Babalawó, Babalao: Sacerdote de Ifá. Individuo cuyo "eledda" es el orísha Orula, el que le asentaron en la cabeza, por lo que posee los secretos supremos en Regla de Ocha, pues Orula los recibió directamente de Olofi. La sabiduría de los babalawós la reciben de Orula que es el dios sabio por excelencia. En la categoría sacerdotal de babalawó solamente se admiten hombres de supremas condiciones de fe y moral. En esta categoría existen secretos y rituales desconocidos para los que no pertenecen a ella. Una santera vieja me dice que "muchos babalawós solamente tienen el santo lavado, pero no asentado", por lo que no pueden pasar al cuarto de asiento. El santero necesita del babalawó para sacar el "itá" de quien hace santo. Tres babalawó son necesarios en rigor ritual para "bajar Orula"; en casos muy especiales se han necesitado más, hasta doce. Menos de tres no pueden bajar a Orula. El babalawó, como el santero, tiene "Ilé Ocha", hijos y conducta ritual general muy semejante a la del santero. El babalawó suele ser más inteligente, sabio y rigorista que el santero por exigencias de su categoría. Olúo es el babalawó muy viejo y sabio en Orula. Sinónimos: Babalao

    Vocabulario Lucumí > Babalawó:

  • 116 Diloggún:

    Cauris o Cyprea moneta. Se trata de unos caracoles de origen marino, los cuales se usan para piezas de un oráculo en la Regla de Ocha. Cada caracol se llama "aye" y el jüego de los dieciséis que se usan forman una mano de Obatalá y se llama entonces "Diloggún". A este oráculo se le agregan cuatro piezas que se llaman "ibo" o "ibbo", consistentes en dos caracoles mayores y distintos que los 16 anteriores, a los que nombran "edele" y, por eso dicen que son 18 caracoles o "ayes". Las otras piezas son un huesito y una semilla vegetal parecida al ojo de buey. El oráculo del Díloggún presenta una complejidad que nosotros no hemos podido penetrar. En primer término, son 16 piezas iguales de origen animal y marítimo, a las que llaman individualmente "aye". Esos caracoles forman "manos" de distinto número según sea el orísha a quien le pertenezcan. La mano de " ayes" de Elégguá tiene 2 [m2]cauris, pero si es del arará Echú Afrodi, tendrá 24. La mano de cauris que se usan para el oráculo del Diloggún es considerada algunas veces, como dos veces ocho, que hacen dieciséis, el mismo número de ventanas del castillo que Obatalá tiene en la loma con 365 puertas abiertas. Los dieciséis "ayes" o cauris están desfondados o rotos en el caparazón opuesto a su natural abertura. Ese arreglo es indispensable para que puedan caer y sostenerse boca arriba. Estos cauris, así como el obí kolá y muchos otros productos, son traídos de África, desde que a Cuba trajeron los primeros africanos. Los dos caracoles que sobran, los llamados "edele", se obtienen en Cuba y no se les rompe por parte alguna; se usan tal cual se obtienen de la playa. El tercer elemento es de naturaleza vegetal, se trata de una semilla. El cuarto, es de origen óseo humano; es una pequeña vértebra coxígea, obtenida en el trasiego de los restos óseos del ilé Yanzá. El manejo que un sacerdote de Ocha le da a la mano de dieciséis cauris y a las cuatro piezas del "ibbo", nos hacen presumir que el dicho "ibbo" constituyó en algún momento un oráculo independiente de los dieciséis "ayes" Los caracoles y el ibbo, es decir, las piezas del Diloggún están siempre en el igbudú y cuando llega un necesitado a quien hay que "registrar", consultar o verle sus problemas y cómo resolvérselos, se escribe el nombre de pila y sus apellidos en una hoja de papel y con lápiz, también se anota la edad, el día y mes en que nació. Acto seguido el babálócha o iyálócha tiene que moyubar, como en el coco, principiando por llamar a Olofi, Oloddumare y algunas veces a Oloruñ para pedirles la bendición e informarles que va a servir en bien a un "hijo". Continúa el rezo de moyubar, con todos los muertos o sea los Babá Eggún, según se puede ver en la fórmula que dice: Ibae baé, bayé tonú pato lo Babá Eggún, para todos los babáronú que laboran por mí, que están en el mundo de la verdad... Se puede seguir llamando o moyubando muertos que fueron los mayores en el santo del sacerdote, para que lo asistan con su experiencia e impida el entrometimiento de los espíritus perturbadores, pero no siempre es así, porque el santero teme la presencia de muchos muertos en las cosas del Santo. Continúa el sacerdote o sacerdotisa llamando oríshas, principiando por Echú y Elégguá. Siempre que llama, dice quien llama: Fulano de tal, hijo de tal santo, que lo llama para pedirle la bendición y para que Ud. sepa que va a hacer esto o lo otro y requiere que Ud. facilite su permiso. Esa labor de moyubar sigue así con cada orísha en un orden que ya aparece muy alterado en muchos usos criollos. Aquí exponemos el orden del rezo al Diloggún que sigue un babálócha de Guanabacoa, quien es según se dice "una autoridad en el Santo". Olofi, Orísha Oko, Olodumare, Inle, Babá Elégguá Osa Griñán, Oggún, Babalú Ayé, Osáin, Equn (Ofé Díloggún), Orúmbila, Leripín, Babá Obatalá, Changó, Yemayá, Obeye Loro, Olokún, Argayú, Yeyé Okari. Terminado el oru, que no siempre lo siguen los santeros nuevos y a veces le alteran el orden de los oríshas, se pasa a rogar el caracol. El sacerdote toma en sus dos manos el oráculo y lo bajea con su aliento para darle aché, luego fricciona las piezas y las moyuba; se las presenta al consultado: igual que se hace con el coco; después tira y anota el número de piezas que cayeron boca arriba. Continúa tirando y anotando, a la vez que consulta las manos del consultado, quien en cada tiro tiene que friccionar el huesito y la semilla pidiendo con fe y concentración lo que desea saber, a la vez que deja en cada mano cerrada una pieza al azar. Por los números anotados el awó hace sus interpretaciones y le dice al consultado lo que contestan los oríshas o el muerto. Este oráculo siempre tiene un ángulo subjetivo que llama la atención. Está prohibido terminantemente su uso a los babalawós o hijos de Orula. así como a los no consaqrados. Es un oráculo complejo en grado extremo. "Hay dos formas de tirar los caracoles, pero dicen lo mismo". Se mantiene en la memoria una numeración para el exclusivo uso de los caracoles de la cual hemos obtenido hasta el número doce, según se puede ver a continuación: 0 [m2]Okana Sodde; 02 Ebioko; 03 Ogunda; 04 Eyorosún; 05 Oché; 06 Obbara; 07 Odi; 08 Eyeunlé; 09 Osa; 10 Ofúnfún; 1 [m2]Ojuání; 12 Eyilá. En cuanto a las llamadas letras de los caracoles, se trata de las posiciones que se producen en cada tiro; esas posiciones dan un número de cauris boca arriba y otro boca abajo; estas posiciones son las que se llaman ódu; óddu; odún; órdu; órdún o simplemente "letra" o camino. "Cada órdún es una persona y su historia". Ud. puede tener una vida como la de alguna de esas personas que sirven de patrón en el oráculo. Depende del sacerdote o sacerdotisa hacer las correctas interpretaciones, si tiene suficiente experiencia y aché. No se trata de cosa simple, a juzgar por el tiempo que le toma a los iniciados, aprender el arte de tirar los caracoles, que al decir de los que saben de estas cosas hay que recordar treinta y seis odús para ser un principiante capaz de llegar a conocer cientos de letras. Sinónimos: Diloggún, Edibó, Emilogún, Endilobú, Enilogún

    Vocabulario Lucumí > Diloggún:

  • 117 tunki

    adj. indigente; necesitado
    --------
    s.(zoo) gallito de las rocas; tunque; duda

    Diccionario quechua - español > tunki

  • 118 behar

    necesidad, menester trabajo. / pobre, necesitado, obligación.

    Glosario Euskera Español > behar

  • 119 behardun

    menesteroso, necesitado falto.

    Glosario Euskera Español > behardun

См. также в других словарях:

  • necesitado — necesitado, da adjetivo pobre, menesteroso, indigente, falto, escaso, alcanzado*, defectuoso*, desheredado, desnudo, corto de medios, con un trapo atrás y otro delante, con una mano atrás y otra delante. Desnudo es una forma figurada que …   Diccionario de sinónimos y antónimos

  • necesitado — necesitado, da adjetivo,sustantivo masculino y femenino 1. (estar) Que no tiene lo necesario para vivir: Hay muchos pueblos necesitados en el Tercer Mundo. Su familia está muy necesitada de comida …   Diccionario Salamanca de la Lengua Española

  • necesitado — necesitado, da (Del part. de necesitar). adj. Que carece de lo necesario para vivir. U. t. c. s.) …   Diccionario de la lengua española

  • necesitado — ► adjetivo/ sustantivo 1 Se aplica a la persona que no tiene lo necesario para vivir: ■ siempre que puede, ayuda a los necesitados. SINÓNIMO pobre ► adjetivo 2 Que tiene necesidad de una cosa para desarrollarse o para desarrollar una actividad: ■ …   Enciclopedia Universal

  • necesitado — {{#}}{{LM N27114}}{{〓}} {{SynN27784}} {{[}}necesitado{{]}}, {{[}}necesitada{{]}} ‹ne·ce·si·ta·do, da› {{《}}▍ adj./s.{{》}} Pobre o falto de lo necesario para vivir. {{#}}{{LM SynN27784}}{{〓}} {{CLAVE N27114}}{{\}}{{CLAVE}}{{/}}{{\}}SINÓNIMOS Y… …   Diccionario de uso del español actual con sinónimos y antónimos

  • necesitado — adj y s Que carece de lo necesario, que tiene muchas necesidades; pobre: Quieren dar protección a los estudiantes necesitados , la población más necesitada …   Español en México

  • Centro Comunitario de Atencion al Migrante y Necesitado (CCAMYN) — The Centro Comunitario de Atencion al Migrante y Necesitado(CCAMYN) is a free shelter for migrants in Altar, Sonora and is run by the local Our Lady of Guadalupe Church. The name means Community Center for the Attention to the Migrants and Needy …   Wikipedia

  • necesitar — Se conjuga como: amar Infinitivo: Gerundio: Participio: necesitar necesitando necesitado     Indicativo   presente imperfecto pretérito futuro condicional yo tú él, ella, Ud. nosotros vosotros ellos, ellas, Uds. necesito necesitas necesita… …   Wordreference Spanish Conjugations Dictionary

  • Fray Juan Pérez — Saltar a navegación, búsqueda Para el tratamiento genérico, véase Juan Pérez (alias). Fray Juan Pérez Estatua en pie …   Wikipedia Español

  • Triple Crown Championship — En la lucha libre profesional, un Campeón de Tres Coronas es un termino para describir a un luchador que ha ganado tres de los más prestigiados títulos de su promoción típicamente un título de peso pesado, un título de parejas, y un título de… …   Wikipedia Español

  • Obra — (Del lat. opera, trabajo.) ► sustantivo femenino 1 Cosa hecha o producida por una persona: ■ ese muro es obra de tu padre. SINÓNIMO creación producto 2 ARTE, LITERATURA Cualquier producción literaria, artística o científica, en especial la de… …   Enciclopedia Universal

Поделиться ссылкой на выделенное

Прямая ссылка:
Нажмите правой клавишей мыши и выберите «Копировать ссылку»